viernes, 6 de julio de 2012

Multimedia, realidad o ficción?

Antes de empezar a leer mira este video ...
¿Quién no querría un libro de texto como estos? Es lo que todos imaginábamos, con solo mover un dedo tenemos todo lo que necesitamos para aprender, ...., ¿todo?
Para aprender hace falta "voluntad", hace falta "querer", hace falta "esfuerzo", hace falta "tiempo".
Aprendemos no solo con lo que vemos y tocamos, sino también con lo que construímos, y con lo que contamos.
Los niños son grandes consumidores de multimedia, de actividades interactivas, pero puede ocurrir que lleguen a la respuesta sin una fase de reflexión, esto impediría el aprendizaje.
Es necesario dedicar tiempo a la manipulación real, sobre todo a ciertas edades en que se está despertando el razonamiento abstracto. Una imagen no reemplaza el objeto real, y solo se justifica si este no está a su alcance. Debe haber una buena combinación entre las situaciones reales y las virtuales, y promover que sean ellos los que, a partir de las primeras lleguen a las segundas.
En el siguiente video vemos una recopilación de imágenes de poliedros construidos por alumnos de 1º de ESO que luego se publican en redes sociales.

El libro no lo es todo, aunque hay que reconocer que a todos nos hubiese gustado tener un libro como este en nuestra etapa estudiantil, además de una buena cobertura de red para que funcionase con agilidad a un precio asequible.

miércoles, 4 de julio de 2012

Aprender grabando

Entre los consejos que antaño dábamos los profesores de matemáticas a los alumnos para preparar la asignatura el más común era que "manchasen papel". Para aprender matemáticas hay que escribir, decíamos, porque a través del razonamiento que plasmamos en el papel vamos viendo la construcción de la solución del problema, practicamos el cálculo y vemos cómo se llega al resultado. En realidad hablábamos de VER la respuesta plasmada en una hoja de papel, tampoco teníamos mucho más. Pero la revolución tecnológica que ha supuesto el video en la enseñanza y sobre todo su difusión en las redes sociales, así como la obtención de formatos de compresión cada vez más alta ha hecho posible que podamos grabar cómo se resuelve un problema, cómo se realiza un cálculo e incluso que podamos pedirle a nuestros alumnos que sean ellos quienes nos muestren cómo lo han hecho, a nosotros y al público en general.
Aunque todavía quedan algunos pasos que dar para el reconocimiento de la escritura matemática y para que esta se pueda hacer de manera sencilla, el software viene a nuestra ayuda.
En los siguientes videos resumidos podemos ver cómo alumnos de 2º de bachillerato visualizan un ejercicio de geometría del espacio con los programas Autograph y Wiris. El primero fue grabado en modo local y el segundo con una web con servicio de secreencast durante la explicación de clase. El vídeo completo está aquí.
Esta actividad formaba parte de una de las tareas de evaluación que además permitió que los compañeros de clase compartiesen las explicaciones visuales a través de las redes sociales.



Las editoriales también han añadido videos a sus libros de texto digitales, algunos mediante enlaces y otros de realización propia, aplicaciones multimedia con las que los alumnos pueden estudiar por sí solos un algoritmo, deteniendo la explicación tantas veces como sea necesario.
En este enlace puedes ver una muestra del libro de matemáticas de Santillana de 1º de ESO
 
Todas sus unidades se incian con un video, pero en el desarrollo del tema también tienen videos de ayuda sobre cálculo u otros contenidos como el desarrollo de plano de prismas y pirámides. Además en el bloque de matemáticas con el ordenador los videos utilizan software de matemáticas como Geogebra o Calc.
Un consejo para los que decidan utilizarlos es que comprobar que se cuentan con los codecs o plugíns necesarios para que se puedan visualizar y con suficiente ancho de banda.


martes, 3 de julio de 2012

Aprender escuchando

No es muy habitual que un libro de texto digital de matemáticas incorpore audios a sus contenidos. Sabemos que tradicionalmente la música se utilizaba casi en exclusiva para aprender los números o las tablas de multiplicar. Pero las cosas han cambiado y las canciones de contenidos matemáticos abundan en los canales de youtube sobre todo entre el público americano, aunque el filón de la tabla de multiplicar sigue activo. Esta es una parte de la tabla del 9.
La editorial Santillana, cuyo libro web de 1º de ESO he estado utilizando este curso, permite descargar los resúmenes de todos sus temas en los tres formatos, imagen, texto y sonido.
El audio anterior es una parte del resumen correspondiente al tema de los números enteros. Puede servir como ayuda para concentrarse en la lectura o de repaso cuando llevamos un reproductor mp3.
Pero también es interesante que los alumnos puedan grabar sus explicaciones y escuchen cómo se desenvuelven ante un examen oral o en la explicación de una tarea a sus compañeros.
La suma de estos tres elementos: canciones + audios del libro + audios del alumno es igual a un buen aprendizaje en el que un sentido más, el oído, ayuda a conseguir la competencia oral, que tan difícil parece de desarrollar en una clase en la que no siempre hay tiempo para que todos los alumnos puedan usar su turno de palabra.
Si quieres saber más sobre el audio como herramienta educativa puedes consultar este artículo.

domingo, 1 de julio de 2012

Profe, ¿cuál era la contraseña?

Si en algo se diferencian los libros de texto en papel de los digitales es en el acceso, con todas las ventajas e inconvenientes que esto conlleva.
El libro de papel, único e intransferible, se compra en la librería y queda en manos del alumno sin mayor problema y para siempre. El libro digital no se vende como tal, se vende su "acceso" y por tiempo limitado. El libro no está en su poder salvo que sea un formato offline con soporte cd o pendrive. Así que lo que compramos es una licencia de uso, la "llave de la puerta". Esta es la primera diferencia importante; tanto, que algunas personas no entienden que lo que han comprado es un código y preguntan si lo pueden bajar, descargar, imprimir, etc. Es algo totalmente novedoso y difícil de aceptar por  una parte de los usuarios. En el otro lado están los miedos de las editoriales, ¿y si nos lo copian? ¿y si acceden varias personas con la misma clave? ¿quién se hace responsable?. Para solventarlo algunas de ellas crean accesos a los libros con varios niveles de seguridad y sujetos a normas legales a las que un niño de 12 años no se puede someter, y llegan las complicaciones. Un primer problema es la necesidad de tener una cuenta de correo electrónico. La clave de acceso se asocia a esa cuenta y en caso de querer cambiarla hay que entrar en el correo para realizarlo. Como sabemos un niño de primaria o del primer ciclo de ESO no tiene edad para tener una cuenta de correo.

El segundo problema es la norma legal que se pone al acceso. Un adulto debe hacerse responsable de copias, descargas o mal uso que se pueda hacer del contenido del libro, por lógica debería ser el que crea el acceso al usuario. Esto nos pone en situación de valorar si es el centro o las familias quienes deben asumir estas responsabilidades.
Finalmente está la dificultad de la contraseña. Una clave que tiene como mínimo seis caracteres de letras combinadas con números, que no se puede cambiar y que es diferente para cada libro (si son de distinta editorial), multiplicando por el número de libros y añadiendo los nombres de usuarios más la edad de los niños el resultado es el CAOS.
En la presentación de imágenes vemos la pantalla de acceso del alumno a la web del libro digital de Anaya, las claves son proporcionadas por la editorial y no permite el cambio de usuario ni de contraseña. El acceso es único por lo que simultáneamente otro usuario no puede acceder con los mismos datos. Si no se cierra o se confunde más de tres veces se puede bloquear.
En nuestro caso particular la dificultad se ha resuelto contratando una empresa intermediaria que nos ha puesto todos los libros en la misma plataforma, la que se ve en la última imagen, lo que permite acceder a todos ellos con un mismo usuario y contraseña que está bajo la supervisión del administrador del centro.